El ingeniero , recordó en este mano a mano toda una vida familiar junto a los azules. Como jugador y también como técnico, su amor al equipo. Reconoce que tomó a la U en ese momento deportivo y económico difícil por su cariño al club, pero también que hubo inmadurez y sobre todo creer que era más de lo que en ese minuto la situación requería para manejar al equipo. «Perdí, levanté cabeza y seguí. Y acá está. En europa triunfando.