Ayer la afición del cuadro culé, de refinado y exigente paladar, pifió a Ernesto Valverde cuando sacó del campo al ex Juventus y Bayern Múnich. El chileno había estado cerca de anotar y daba pelea en mitad de cancha. No es heredero de la tradición Xavi Hernández o Andrés Iniesta, pero su juego agresivo va conquistando corazones.
“Poco a poco, Arturo Vidal se está ganando al Camp Nou por las ganas que transmite. El chileno volvió a jugar de titular pese a las molestias que le surgieron tras el partido en Eindhoven y en los 69 minutos que estuvo en el campo exhibió intensidad y capacidad de llegada, merodeando zonas de remate con su instinto. La afición le premió su esfuerzo con una ovación cuando Ernesto Valverde le relevó en el minuto 69 por Carles Aleñá. Vidal agradeció el aplauso”, contó MD.
Sport también llenó de loas al oriundo al jugador de la Roja. “El chileno puso fuerza y garra en un centro del campo que aunque no logró imponer su juego al 100% como mínimo evitó los sustos que dio el equipo ante el PSV. Además con sus amenazas de llegada arrastraba defensores”, se lee en una columna publicada en su portal.
El citado medio destacó la reacción del volante al momento de ser reemplazado, muy distinta a los berrinches que protagonizó hace solo unos meses. «Arturo puso mala cara y se lamentó, pero esta vez no fue para enfadarse con el técnico blaugrana sino porque seguía con muchas, muchas ganas de seguir haciéndolo bien y le dolió dejar el campo. Además al pasar al lado de Valverde le guiñó el ojo y se sentó en el banquillo. Una gran manera de zanjar una polémica y de dejar ver que es todo garra en el campo pero ha logrado calmarse fuera de él y está más que enchufado», narró.
FOTO: ATON Chile