El partido era el reencuentro del vestuario culé con la afición después de la humillante eliminación a manos del Liverpool a mitad de semana, en donde sufrieron una remontada de 4 goles que privó a los dirigidos por Ernesto Valverde de jugar la final de la Champions.
La apertura de la cuenta fue obra de Vidal, quien aprovechó un rechazo del meta David Soria tras un cabezazo para de caño anotar el único gol del partido cuando transcurrían 38 minutos.
El Getafe, que se jugaba una histórica clasificación a la próxima liga de campeones europea, mostró poco en lo que fue un discreto partido, sufriendo los constantes ataques del Barça como un disparo de Malcom que en el 41’ fue sacado apenas con el pie del arquero Soria.
En el segundo tiempo, los blaugranas siguieron dominando las acciones, con Lionel Messi como principal agente de peligro. Además, polémica generó la sustitución del brasileño Philippe Coutinho, quien recibió pifias de la hinchada por ser indicado como uno de los principales culpables en la eliminación en Anfield.
Más tarde, el «King» recibió tarjeta amarilla por una fuerte infracción, en una de las últimas acciones en el opaco juego de un FC Barcelona ya campeón. Y pese a que un cabezazo de Jorge Molina que pegó en el palo en el 89′ generó ilusión en la hinchada visitante, un gol en contra de Djené Dakonam terminó de sentenciar el partido en los minutos finales de juego.
Así, fueron los locales los que se quedaron con una amarga victoria sin poder superar la eliminación en Anfield, triunfo que además complicó al Getafe en su sueño de jugar el torneo más importante de Europa a una fecha del final, y que necesitará en la próxima fecha vencer al Villarreal y una derrota del Valencia para lograr la histórica clasificación.
Foto: ATON Chile