La lesión de última hora de Semedo obligó al «Txingurri» a mover la pizarra. Salió al Ciudad de Valencia con una línea de tres centrales y con Jordi Alba y Dembélé como carrileros. Suárez era la única punta. Messi y Vidal arremetían desde atrás.
El Levante aguardaba con la guardia alta, sin desesperase con la cadencia del toque blaugrana. Sus externos avanzaban a ritmo trepidante por las bandas en busca de los balonazos largos a la espalda de la defensa. Boateng a los 5′ exigió al máximo a Ter Stegen y a los 20’ un centro de Jason no fue conectado de milagro por Toño en el segundo palo. El Barcelona no estaba cómodo. Volvería a sufrir. Boateng, una amenzana constante, azotó el travesaño al minuto ’33.
Cuando el colectivo no funciona, al cuadro culé lo sostiene el tonelaje de sus individualidades. Messi serpenteó con su gambeta indescifrable por el borde del área y filtró un pase hacia el punto penal para Suárez. El nueve no falló y abrió la cuenta a los 36’. Siete minutos más tarde, la “Pulga” estiró la diferencia. El marcador no le hacía justicia a un muy digno Levante.
Al regreso de camarines, el astro argentino desangraría al elenco granota. A los 47’ puso la pelota pegado al palo tras un centro de Jordi Alba y a los 60’ culminó una gran jugada de Suárez con el “Rey”. El uruguayo dejó a su marcador en el camino con un caño y se la dejó servida al chileno. Parecía que el ex Bayern Múnich iba a reventar al arco, pero con un toque exquisito se la cedió a Messi, que definió con el arco a su merced.
Con la tarea hecha, los catalanes se dedicaron a gastar el reloj. Vidal se fue reemplazado a los 78’ por Coutinho. “Partidazo del chileno”, escribió el diario Marca en su transmisión minuto a minuto. Gerard Piqué, al ’88, le puso el colofón a la goleada definiendo como si fuera un artillero de sangre.
El triunfo dejó al Barça como único puntero de la liga española con 34 puntos, seguido por Sevilla y Atlético de Madrid, que tienen tres menos. El próximo sábado recibirá al Celta de Vigo en el Camp Nou.
FOTO:ATON Chile