Fue un primer tiempo de pocas emociones en el Estadio Monumental. En los compases iniciales, el cuadro viñamarino se hacía con las acciones gracias a un recién llegado Bryan Carvallo y su buena conexión con Juan Cuevas, mientras que en los albos hubo poco ímpetu de cara al arco rival.
La llegada más peligrosa de los dirigidos por Mario Salas la protagonizó el joven Iván Morales, que por apurarse desaprovechó un pase de Gabriel Suazo cuando estaba solo en el área en el 23′. En los ruleteros, un disparo de Maximiliano Ceratto a las manos de Brayan Cortés y otra arremetida de Fernando Arismendi fueron las mayores acciones de peligro antes del entretiempo.
En la segunda fracción el partido tampoco encendía. Salas apostó por los ingresos Pablo Mouche y de Jaime Valdés para cambiar el trámite del encuentro, pero ni locales ni visita eran capaces de generar peligro real.
Recién en el 77’, Javier Parraguez pivoteó con mucho peligro un balón que se fue apenas desviado del arco de Cristián Campestrini. Cerca del final, los de Pedrero era levemente superiores al cuadro de la quinta región, e inmediatamente después el mismo Parraguez avisó mediante un cabezazo que reventó el travesaño.
Sin embargo, los méritos defensivos del cuadro dirigido por Gustavo Díaz dieron resultados, y desde la ciudad de los jardines consiguieron rescatar un valioso punto en Macul. Andrés Vilches tuvo un cabezazo en el 92’ que se fue cerca del palo derecho de Campestrini, pero ya era muy tarde y el duelo terminó sin goles.
La igualdad le sienta mal al cuadro popular, que quedó segundo con 29 unidades y a 6 de la punta, mientras que los Oro y Cielo son undécimos con 17 puntos y se alejaron de la zona roja de la tabla. Además, lo discreto del encuentro hizo extrañar a Jorge Valdivia y a Esteban Paredes, ambos fuera de la nómina por no estar aptos físicamente.
FOTO: ATON Chile