En el primer duelo del circuito de «torres», por el parecido físico y el juego agresivo de ambos, el chileno arrancó el partido a buen nivel, como el que mostró la semana pasada en Ginebra, pero poco a poco se fue derrumbando con constantes errores para inclinarse por 3-6, 6-2, 6-1 6-4 en el court Suzanne Lenglen, el segundo más importante del major parisino.
La primera manga fue casi perfecta para el «Príncipe». Aprovechó el poco ritmo y la poca efectividad con el servicio con el que entró el otrora 3 del mundo y ganador del US Open 2009 para quebrar de entrada, en el segundo juego. Luego, en el séptimo salvó tres break points y cerró el parcial sin problemas en el noveno con su envío.
Pero en el segundo episodio el pupilo de Martín Rodríguez ya empezó a verse endeble con su servicio y errático en las devoluciones, mientras que el tandilense se mostró más firme con sus armas. El criollo entregó su saque en el segundo y el octavo game, en ambos tras cometer sendas dobles faltas.
El tercer capítulo fue un trámite. Sin hacer mucho, «Delpo» consiguió dos rupturas, en el cuarto y sexto game, para ganar cinco juegos consecutivos y encaminar su victoria.
Es que en el cuarto set el nacional entregó su envío en el tercer juego, suficiente para que el argentino solamente mantuviera su servicio y sellara todo en dos horas y siete minutos.
De esta manera, Jarry dijo tempranamente adiós a Roland Garros, donde todavía no puede ganar un partido en el cuadro principal en tres presentaciones (cayó en 2017 ante el ruso Karen Khachanov y el 2018 ante el estadounidense Jared Donaldson), y perdió su segundo partido consecutivo ante un top ten, tras caer el sábado ante Alexander Zverev (5°) en la final de Ginebra, quedando 3-3 contra jugadores de este selecto grupo. De paso, dejó a Cristian Garin (37°) como único chileno en el major parisino.
FOTO/ ATON Chile