Según publicó La Tercera, el ente rector del balompié criollo tenía, por reglamento, 72 horas para para entregar un veredicto final sobre el partido entre Unión La Calera y Deportes Iquique, el cual fue suspendido a los 67 minutos por la invasión a la cancha de un grupo de barristas de Colo Colo. Sin embargo, este tiempo se terminó y en Quilín no se pronunciaron.
Sobre una situación así, el Artículo 104 del reglamento del Fútbol Chileno sostiene que «el Directorio, dentro de las 48 horas siguientes, determinará si debe jugarse o no lo que faltaba para completar el tiempo reglamentario, o si se da por terminado el partido, en cuyo caso el resultado será el existente al momento de la suspensión. En caso de que deba jugarse el tiempo faltante, el Directorio resolverá el día, la hora, el lugar y condiciones en que ello se hará. Para los otros casos se aplicarán las normas de las bases de la respectiva competencia».
Además, el reglamento de la ANFP establece que «la Gerencia de Competiciones deberá informar respecto a la reprogramación o resultado final del partido suspendido, dentro de las 72 horas siguientes a la establecida para su inicio originalmente».
De esta manera, como no se cumplieron los plazos, oficialmente el cotejo entre cementeros y Dragones Celestes finalizó oficialmente con una igualdad sin goles, resultado que deja a los nortinos con 25 unidades en la tabla de posiciones, uno más que los azules, que vuelven a la zona de descenso.
ATON Chile